Wednesday, September 8, 2004

Difusa y dibujada a crayón

In my place, in my place
Were lines that I couldn't change
I was lost, oh yeah

I was lost, I was lost
Crossed lines I shouldn't have crossed
I was lost, oh yeah
Tiempos de cambio y cambios, de duda, de replanteos y sobre todo, de errores. No en cuanto a las cosas que hice, sino a la forma en que las hice. Y me pregunto si es humanamente posible equivocarse tanto.
Termina un 'episodio' y me digo a mí mismo: "Esto me demuestra que siempre que se cierra una puerta, se abre otra, o aunque sea una ventana. Nunca es el final del camino, siempre hay un desvío que sirve para seguir en ruta". Pero no es suficiente, tengo que ser yo mismo el que se esmera en tapiar con maderas esas puertas y ventanas recién abiertas (o descubiertas). Lo digo todo el tiempo, soy mi peor enemigo.
Para no aburrir ni aburrime, resumo. Escribí una lista que terminó conteniendo catorce cosas muy variadas que quería y me había propuesto hacer, desde personales -hablo de cafés pendientes- hasta triviales -como la tintorería semanal-, y fijé como objetivo tachar de ella al menos dos por día, a partir de hoy. Con esto espero a trazar una línea más o menos recta que me lleve a algún lugar agradable, un lugar adentro mío en el que me sienta cómodo. Será que me conoceré; lo cierto es que no me tengo ni un poquito de confianza.
Aprovecho el último párrafo para llenar el ricón positivo del día. Si todo sale como debe, hay alta probabilidad de que llegue la banda ancha a mi casita. Entonces sí, no voy a tener excusas para no escribir ni para no visitar mis páginas preferidas y dejar mis comentarios en ellas.
H.